Leyendo por primera vez a Aldous Huxley

Algo que me gusta mucho hacer, es leer listas de libros recomendados. He encontrado de todos los tipos: sobre literatura latino americana, los mejores libros en la historia, literatura moderna, libros de ciencia ficción, de terror… en fin, lo que me gusta es leer por qué recomiendan los libros y apuntar los que me van interesando. Fue así como en varias listas me topé con el nombre de Aldous Huxley. Por la descripción de sus obras sonaba a un escritor que tenía muchas posibilidades de gustarme, así que, cuando tuve oportunidad de comprar libros hace exactamente un año, me compré el de “Un Mundo Feliz”. ¿La verdad? Al final creo que lo pondría en mi lista de libros favoritos 🙂
De hecho, antes de empezar a escribir el post, me fui a buscar más información acerca del libro, y resulta que es el más importante de toda la obra de Huxley; e incluso, se encuentra en el quinto puesto en la lista de las 100 mejores novelas de la Modern Library del siglo XX. :O Lo que me gustó del libro no solo es la historia en si, sino lo que representa, la crítica a la sociedad. A pesar de haberse escrito en los años 30 y que hoy en día siga siendo tomado de referencia me parece algo genial, o aunque también algo triste si lo miramos desde otro punto de vista.
Si no lo han leído, y no entienden nada a lo que me refiero, se los recomiendo. ¿De qué trata? De una sociedad “perfecta”, donde las personas nacen de incubadoras, son cultivadas; y todas las personas nacen con un propósito, y desde pequeños se los hacen saber. Todos saben qué hacer, a donde ir. Al hacer esto, nadie reniega, todos son felices. Es una sociedad tecnológicamente avanzada donde, al final, la pobreza, la familia y la religión son erradicadas para conseguir la paz. Nadie piensa más allá de lo que tiene, y para esos momentos que los sentimientos intervienen en el camino, el gobierno ofrece una droga para hacer sentir mejor a la gente, llamada Soma. Una dosis de Soma y todo está bien.
Hasta ahí diré, no quiero contarles de más.
Es una lectura que definitivamente invita a que nos detengamos y analicemos de cerca cómo funcionamos como sociedad y cómo miramos el mundo que nos rodea. Confieso que, entre más leía e iba avanzando la historia, más me detenía a pensar que, aunque sería genial vivir en un mundo así con ese nivel de tecnología, al final yo no me quedaría en el Mundo Feliz. Por eso mismo, por partes me identificaba mucho con el personaje de Bernard (que es un personaje totalmente opuesto a los habitantes normales de ahí).
En conclusión, después de “Un Mundo Feliz” quedé enganchada con Huxley y fijo seguiré leyendo el resto de su obra. Si ustedes quieren empezar a leerlo, empiecen con este libro y no se van a decepcionar 😉